Minia es el ejemplo perfecto de perseverancia e ilusión. En casa le decían que cantaba con la nariz, le costaba seguir el ritmo y entonar y a día de hoy creo que ha empezado a encontrar su voz, que es preciosa, y solo hemos arañado la superficie. Desde luego esta chica es un diamante en bruto, tanto se apunta para una quedada para cantar como construye maravillas con sus manos. Ella es una persona mágica y espero tener la suerte de seguir compartiendo muchos momentos con ella y seguir aprendiendo la una de la otra, yo ya no la puedo ver como una alumna para mi se ha convertido en una amiga de esas en las que realmente puedes confiar.
